Equipa a los pequeños exploradores con linternas y brújulas (improvisadas con imanes y clips, por supuesto). El objetivo es llegar al sofá sin tocar el suelo, porque, como todos sabemos, el suelo está hecho de lava ardiente.
¿Quién necesita ingredientes reales cuando tienes imaginación? Dale a los niños utensilios de cocina y deja que preparen un festín imaginario. Bonus: ¡No tendrás que fregar después!
Todos tenemos esos calcetines solitarios que han perdido a su pareja. ¿Por qué no hacer un torneo de lanzamiento de calcetines? Puntos extra si logras que entren en la cesta de la ropa sucia.
Esconde pequeños "tesoros" por la casa y crea un mapa del tesoro. Los niños tendrán que seguir las pistas para encontrar el botín. Spoiler: el verdadero tesoro es mantenerlos ocupados por más de 10 minutos.
Ollas, cucharas, cajas de cartón... todo sirve para crear una banda de rock. Prepara tus oídos para el concierto más ruidoso y adorable de la historia.
Con pinturas lavables, deja que los niños creen su obra maestra en las ventanas. La lluvia afuera solo añadirá un efecto especial a su arte.
Crea una fortaleza con mantas y cojines y sumérgete en un maratón de cuentos. Puedes leerles o inventar historias donde ellos sean los héroes.
¿Por qué esperar a Halloween? Saca los disfraces y organiza una fiesta de baile. La regla es simple: si no estás disfrazado, ¡no puedes bailar!
Saca todos los puzzles que tengas y haz un campeonato. El primero en terminar gana el honor de elegir la próxima película para la noche de cine.
Crea capas con toallas viejas y máscaras con cartulina. ¡Que cada niño elija sus superpoderes y salve el mundo (o al menos el salón)!
Dale a los niños papel y pinturas y pídeles que creen su propia obra de arte moderno. Luego, hagan una exposición en casa donde cada uno pueda explicar su obra.
Con cojines, sillas y cintas, crea un circuito de obstáculos en el pasillo. Los niños tendrán que pasar por debajo, saltar y esquivar para llegar a la meta.
Realiza experimentos sencillos y seguros con cosas que tengas en casa, como hacer un volcán con bicarbonato y vinagre o crear cristales con sal y agua.
Usa calcetines viejos para hacer marionetas y deja que los niños creen su propio espectáculo de títeres con una historia que ellos mismos inventen.